sábado, 4 de febrero de 2012

Sara González: maravillosa voz de la Nueva Trova


La voz femenina de la Nueva Trova Cubana ha fallecido este miércoles 1 de febrero a los 60 años en su natal ciudad de La Habana. Su obra es fiel testimonio del momento histórico que le tocó vivir, así como su compromiso con el devenir social y político de su tierra.
Fotos de Sara: gentileza de Kaloian Santos Cabrera

Sara nació el 13  de julio de 1949 en el barrio habanero de Cayo Hueso. Su primer maestro de música ha sido Nené Enrizo, quien la introdujo en el maravilloso mundo de la guitarra, mostrando Sara grandes condiciones para el arte desde pequeña. Ya en su juventud, ingresa en el Conservatorio Amadeo Roldán para tomar clases de viola. Posteriormente se recibe de Profesora de Guitarra y Solfeo en la Escuela Nacional de Instructores de Arte.
Hacia finales de los años 60, Sara participa de un conjunto musical de cierta fama, “Los Dimos” y también forma parte de un dúo con Pedro Luis Ferrer. En ese tiempo, la lectura de las obras de José Martí y los cambios que acontecían tras una década del triunfo de la Revolución influyeron notoriamente en Sara, quien plasmará en su obra ese riquísimo sustrato cultural. En 1970 se forma el Grupo de Experimentación Sonora, una iniciativa del ICAIC (Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfica) que buscaba formar musicalmente a jóvenes creadores e incentivarlos a crear obras que complementaran las nuevas expresiones cinematográficas. Esta fantástica experiencia fructifica en canciones como “Fragmentos del 27 de noviembre” (sobre un poema de José Martí), “De padres a hijos, juntos a la Revolución” (1973, para el filme “La Nueva Escuela”, de José Fraga) y “El programa del Moncada”, sobre textos de Fidel Castro. Esta última canción forma parte del documental del mismo título, dirigido por Octavio Cortázar, también de 1973. Sara también interpreta obras de sus compañeros del Grupo, como “Canción de los C.D.R.”, de Eduardo Ramos, o “Un hombre se levanta” de Silvio.



En 1975, la institución cultural Casa de las Américas le encomienda la creación de canciones basadas en poemas de José Martí. Este desafío, incentivado por sus colegas del Grupo de Experimentación Sonora, se plasma finalmente en el disco “Versos de José Martí” (1975) e incluye “Versos sencillos” y “Crin hirsuta”, por ejemplo, manifestando el gran talento de Sara González. En sus próximos discos alternará obras de otros autores con creaciones propias de gran calidad como “¿Qué dice usted?”:

¿Qué dice usted,
que una mujer es la flor
de aquel Edén, del dulce hogar,
y para hacer el amor?
Si la historia nos grita otra verdad.

Por otra parte, “Girón: La victoria”, es la tercera parte de una obra conjunta sobre la invasión a Playa Girón acontecida en abril de 1961. La magnífica fuerza interpretativa de Sara es una de las caras de la moneda. Sara puede emocionar con la dulzura de una canción de amor o con la agitación de una obra que requiere el máximo vigor para transmitir toda su potencialidad. Así lo demuestra también en dos canciones dedicadas a Ernesto “Che” Guevara: “Su nombre es pueblo”, de Eduardo Ramos y “Andes lo que andes”, esta última junto al grupo Manguaré. Todas estas obras pertenecen a su disco “Sara”, de 1977, aunque las dos últimas pudieron ser disfrutadas por el público argentino en la colección de 3 CD “Canciones al Che” que publicó el diario Página/12 en el año 2000.



El único disco original de Sara publicado en Argentina ha sido “Cuatro cosas”, de 1982. Aquí lo editó cinco años después el sello RCA, para delicia de los amantes de la Nueva Trova. Contiene una selección de las mejores canciones del género, como “Ámame como si fuera nueva”, de Miriam Ramos, “Canción (De qué callada manera)”, de Nicolás Guillén y Pablo Milanés, en fantástico dúo con Pablo, “De otra manera”, de Vicente Feliú y “Cuatro cosas” de Noel Nicola, además de la festiva “Amor de millones”, de la propia Sara. Como si todo esto fuera poco, hay emotivos homenajes: el primero al “Comandante Carlos Fonseca”, de Tomás Borge y Carlos Mejía Godoy, recordado protagonista de la Revolución Sandinista, y “A una heroína de la Patria”, sobre un poema de Fina García Marruz dedicado a Haydeé Santamaría, combatiente del Moncada y directora de la Casa de las Américas. En varias canciones del disco la acompaña el excelente grupo Guaicán, dirigido por Andrés Ordás Aguilera, más conocido como Pepe Ordás.

Versión argentina, en casete, de la producción "Cuatro Cosas"



En 1990 aparece, ya en formato CD, una maravillosa obra: “Con apuros y paciencia”. Sara y el grupo Guaicán nos entregan hermosas versiones de canciones que, aun conocidas, no dejan de emocionar en la hermosa voz de Sara: “Hoy mi deber”, de Silvio, “Por qué cantamos” (Mario Benedetti / Alberto Favero), “Son oscuro”, excelente canción de Noel Nicola y el divertido “Son de la muerte” de Frank Delgado. Sara aporta sus composiciones “Dime dónde cantar” y “Con apuros y paciencia”.
En 1998 publica para un sello español nuevas versiones de su repertorio, a modo de “Grandes éxitos”, con otro acompañamiento pero acompañada de grandes voces. Así, podemos escuchar y disfrutar “Mírame”, bolero-son de y junto a Pepe Ordás, “Amor de millones” (el mismo dúo), “De donde viene el amor”, de Ordás, junto a Pablo Milanés y “La guitarra”, de y con Amaury Pérez Vidal. La etiqueta Caribe Productions Inc. se encarga de publicarlo en Cuba. Si bien González comparte escenario con grandes artistas como Joan Manuel Serrat, Mercedes Sosa, los nombrados Silvio, Pablo y Noel Nicola, Daniel Viglietti y Beth Carvalho, no tenemos oportunidad de disfrutar de su arte en nuestro país, excepto una fugaz presentación en un concierto conjunto de Milanés y Rodríguez.


La década siguiente encuentra a Sara trabajando en nuevas obras. “Sin ir mas lejos”, grabado en 1995 y publicado en 2000, es un homenaje a Marta Valdés, quien participa en varias interpretaciones.  “Son de ayer y de hoy” (2001) incluye obras de Silvio, Noel, Miriam Ramos e incluso un dúo con Compay Segundo (“Te apartas de mí”). Los dos últimos discos publicados por Sara son dos volúmenes de “Canto de mujer” publicados el primero en 2004 y el segundo y último en 2009, incluyendo obras de Yusa, Isolina Carrillo, Lázara Rivadavia, Liuba María Hevia (“Ausencia”), Radeunda Lima (la conocidísima “Mi tierra es así”) y un par de canciones del repertorio de Celina González: “Flores para tu altar” (Julia Ana Mendoza) y “Yo soy el punto cubano”, de la propia Celina y Reutilio Domínguez. Por su parte, Sara aporta sus creaciones “Por todo, gracias” y “Todo y más”.
En los últimos tiempos la voz femenina de la Nueva Trova se encontraba trabajando en su peña “El patio de la Gorda”, como la llamaban cariñosamente. Allí dio su último recital el 26 de diciembre de 2011. La tristeza de su partida sólo se mitiga al calor de su magnífica obra musical y poética.